El otro día fue el cumpleaños de mi amiga Alba y mi madre no me dejaba ir. Cómo no sabía como decírselo me invente una excusa, y esta era: Alba siento muchísimo no haber podido ir a tu fiesta de cumpleaños pero es que cuando iba de camino vi algo en el cielo como si fuera un ovni. Cada vez lo veía más cerca hasta que chocó con la tierra, de repente la puerta de la nave se abrió y salió de ella un alienígena de color verde se fue acercando hasta mi y me llevó hasta el interior del ovni. Allí observé que había más de un alienígena, me entró bastante miedo, se me acercó uno que era de color azul y empezó a decir palabras muy extrañas. Cuando me di cuenta yo estaba bebiendo un vaso de agua con un sabor muy raro, ese agua me fue adormilando y al fin me quedé dormida. Cuando desperté estaba en la puerta de mi casa.
Creo que Alba no se creía lo que oía pero al fin me dijo: Claro que te creo amiga mía.
